viernes, 4 de marzo de 2011

DIVERSAS PRUEBAS

Contínuamente en nuestro caminar por este mundo, enfrentamos muchos sinsabores, problemas, y sentimos que vamos a morir, pero al escuchar a otros en peores circunstancias, es el momento de agradecer a Dios pues las nuestras son pequeñeces.
He aprendido que para lograr un buen vino las uvas deben ser maseradas, para un buen aceite las aceitunas deben ser presionadas y el pan se logra luego de triturar el grano. Son reflejos de que las cosas que nos pasan son para formación, Dios nunca se equivoca, solo que nosotros somos los que rechazamos el tratamiento y frenamos la bendición; nos peleamos con nuestro Creador, le echamos la culpa por todo lo que nos sucede, creemos que sabemos más que El; que equivocados estamos; el que la bendición esté sobre nosotros no significa que tengamos la aprobación de Dios, hemos perdido el rumbo y estamos viviendo para nosotros, olvidando que hay una área de nosotros que clama encontrarse con nuestro Diseñador, hay una parte de nosotros que quiere renacer y disfrutar del verdadero diseño para el cual fuimos puestos en este mundo.
Cuantos de nosotros le hemos dicho a Dios: Quiero que tomes mi vida y la transformes, te entrego el control de mi vida haz conmigo lo que quieras...., creo que todos lo hemos hecho, algunos de manera sincera, otros motivados por un hermoso sermón donde se nos ha amenazado con irnos al infierno si no lo hacemos.
Le invito a mirar en su Biblia en el Nuevo Testamento el libro de Santiago, capítulo 1 verso 2: "Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halleis en diversas pruebas."
Realmente cuando afrontamos el quedarnos sin trabajo, cuando perdemos un ser amado, o tantas otras situaciones dificiles podemos sentir gozo? y más aun de manera suprema? he manifestado que a muchas personas que empiezan a conocer la vida cristiana, recién asisten a una iglesia, les dicen, venga, busque a Dios y se le acabarán sus problemas, su pareja cambiará, su hijo saldrá de la droga, o su pariente será sanado, y no digo que esto no pueda suceder, pero permítame decirle que no es la constante, hemos escuchado aquel versículo que habla de tomar la cruz y seguir a Cristo, pero realmente lo hemos entendido? cruz significa dolor, sufrimiento, verguenza; al involucrarnos con Dios debemos saber que, si lo hacemos de una manera sincera, se presentarán cambios en nuestra vida, muy radicales, que afectarán a los que nos rodean y aun ellos se volverán contra nosotros; las circunstancias, los problemas, las personas cercanas, son usados por Dios como recursos para formarnos como sus verdaderos hijos. Veamos el verso 3 "Sabiendo que la prueba de vuestra fe obra paciencia. 4 Y la paciencia consuma la obra, para que seais perfectos y enteros, sin faltar en alguna cosa." La palabra paciencia la hemos interpretado siempre como relacionada a saber esperar, pero va mucho más alla, tiene que ver con aprender a soportar, con aprender a sufrir, con ser benignos que tampoco quiere decir que seamos bonachones; la paciencia cuando la entendemos permite que la obra de Dios en nosotros sea consumada, sea terminada. Bueno pero cómo podemos entender cuando estamos siendo formados? Verso 5: "Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, (el cual da a todos abundantemente, y sin reproche) y le será dada." Este verso normalmente lo utilizamos fuera del contexto, y creemos que se refiere a pedir la sabiduría para pasar un examen, para presentar una entrevista y otras cosas por el estilo, pero no el contexto del versículo es para saber y entender el porqué de la prueba o situación, para poder apropiarnos de la enseñanza en vez de estar quejando ante Dios, se supone que le entregamos el control de nuestra vida, y le dijimos que nos formara, que confiamos en él, entonces a qué jugamos, lo dejamos actuar confiados que sabe que es lo mejor para nosotros, o solo lo dijimos movidos por un momento de sentimentalismo o de presión espiritual?.
Es tiempo de despertar, es tiempo de convertirnos en ese excelente vino, en ese fino aceite y en ese sabroso pan; no te olvides que Dios está buscando verdaderos adoradores, no religiosos ni místicos, ni fanáticos; no, El quiere hombres y mujeres dispuestos a disfrutar de las mieles de la bendición, que quieran entrar en el Secreto de Dios; El está buscando ese tipo de personas.

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